ácida corre por mi mejilla
tu burla; jugos mezclados,
mis lágimas, tu saliva.
Cae tu máscara vacía,
tu meticuloso plan,
el disfraz, el guión,
y todas las palabras
ensayadas que decías.
Te reíste de mí,
de mi idiotez, de la herida
y toda su historia.
Inocente (o estúpida) yo
esperando, sonriendo
con cada destello de sol,
y con el cielo que reflejaste aquella vez
Quema mis labios
tu beso mortífero,
que no fue para mí,
sino para el cardo,
que alegre seducía.
Ilusiones, trucos,
humos, cortinas
toda una artillería,
para robarme hasta el color de mis días.
No te fue suficiente mi cariño
la atención desmedida,
incluso mis lágrimas no te bastaron
pero fue necesaria mi agonía?
Existen cuchillos, martillos, tijeras
y otros artefactos de tortura.
porque elegiste lo peor?
porque si ya te habías llevado mi alma,
porqué no me arrancaste el corazón.
porque me buscas y me hablas?
Sigo siento tus mordiscos,
el desgarro, la herida latente,
aún hay olor a mentira,
y yo amándote todavía...